La trayectoria

Ricardo Martínez nació en Santiago de Chile en 1956. Hijo de padres españoles, se mudó a Madrid, junto a su familia, en 1969.

Su carrera profesional despega a finales de los años 70, haciendo cómics, ilustraciones y dibujos publicitarios. En 1981 se traslada a Estados Unidos, donde trabaja para agencias de publicidad y para los periódicos The Miami News y The Miami Herald.

En 1987 Ricardo, junto a su amigo de infancia, Nacho, empiezan a publicar el cómic Goomer en las páginas de El País. Dos años después regresa a Madrid para fundar un nuevo periódico, El Mundo, como subdirector de ilustración y gráficos. A partir de mayo de 1990 Ricardo, junto a Nacho, comienzan a publicar una viñeta de opinión todos los días en dicho medio, firmándolas como Ricardo & Nacho. En febrero de 2002 Nacho deja la viñeta y Ricardo pasa a hacerla en solitario.

Ricardo se especializa en la técnica del scratchboard para sus ilustraciones, mayormente para las secciones de Opinión de los periódicos en los que trabaja.

Desde 2008 colabora con una agencia de ilustradores de Estados Unidos, Richard Solomon Artists Representative, publicando su trabajo en revistas, libros y agencias publicitarias de todo el mundo.

Premios

Ricardo ha ganado varios premios, entre ellos 8 medallas de oro y un “Reconocimiento especial del jurado” del Society of Newspaper Design, varios oros de los premios Malofiej de España, el premio Internacional de Prensa, recibido del Secretario General de las Naciones Unidas, Kofi Annan, el premio Tono de la Comunidad de Madrid, tres premios Haxtur del Festival de Cómic de Gijón, el Gat Perich, otorgado por editores de periódicos de Barcelona, El Premio Mingote, otorgado por los directores de periódicos españoles. La película Goomer ganó el Goya como mejor largometraje de animación. Sus dibujos han aparecido en los anuarios del Society of Illustrators.

Exposiciones

Ricardo ha participado en multitud de exposiciones individuales y colectivas, entre ellas las exposiciones del Salón del Cómic de Barcelona, Getxo, Madrid, Andorra y otras ciudades de España.

Merece destacarse la exposición sobre toda su obra en la sala de Santa María la Rica en Alcalá de Henares y en la Fundación Diario Madrid. Sus trabajos han sido expuestos varios años en el Society of Illustrators de Nueva York.

Entre los museos que cuentan con algún trabajo de Ricardo aparecen el Museo Olímpico de Lausana, la Biblioteca Nacional y el Congreso de los Diputados de Madrid, El Museo del dibujo del castillo de Larrés y la biblioteca Bill Clinton, entre otros.

Clientes

Aparte de los tres periódicos para los que ha trabajado, The Miami News, The Miami Herald y El Mundo, sus ilustraciones han aparecido en revistas como The New Yorker, Foreign Affairs, Time, Science, Harvard Alumni Magazine, O Jogo, Sports Illustrated, Scientific American, Harper’s, Texas Monthly y muchas otras. Ricardo ha diseñado varios sellos para Correos de España.

Entre sus clientes se encuentran Coca Cola, American Express, 7-Up, Telefónica, Ayuntamiento de Madrid, UNICEF, Banco Nacional de Perú, Gillette, Gallo, Harper’s y Rocky Mountain Institute, entre otros

Los pasos para realizar un scratchboard

Cuando recibo un encargo, después de reunir toda la documentación disponible, empiezo a realizar un “brainstorming” sobre el papel y a producir varios bocetos que me podrían llevar a la idea original sobre el tema. Normalmente esto incluye muchos enfoques, algunos pueden llevar a una caricatura o a un retrato realista, dependiendo del tono del artículo. Una vez que les he enseñado los bocetos al cliente y se ha tomado una decisión mutuamente aceptable, ya me meto de pleno en la investigación de encontrar todas las imágenes visuales para completar el trabajo.

El dibujo empieza a trazarse a lápiz, para mi es la parte más importante de la ilustración. Esta es la fase dónde se revele el carácter de lo que hago.

Una vez terminado el dibujo, trazo su silueta sobre la tabla de scratch, o “scraperboard” y relleno esa silueta con tinta china. Cuando se seca por completo, comienzo a raspar la tinta con una herramienta y empiezo a sacar volúmenes, muy parecido a cómo se hace en la escultura. Si alguna vez añado color, lo hago con Photoshop, y no directamente sobre el dibujo orignal.